Para los herreros, ‘dar la primera forma a una pieza de metal, con el martillo y el auxilio del fuego o mediante el uso de prensas, como es el caso de los objetos de “hierro forjado”. También significa, por extensión, ‘construir para sí una carrera o profesión’, como en este fragmento periodístico (El País, 26/7/1997): Valderrama ha forjado su carrera estoqueando ganaderías de las denominadas duras. Otro significado que le atribuye la Academia es el de ‘inventar, fingir, fabricar’: han forjado una trama de falsedades y mentiras. En arquitectura, es construir un elemento estructural horizontal, que es capaz de soportar su propio peso y el de las sobrecargas que se le impongan en el uso.
La palabra nos llegó desde el francés forger, con el significado ya mencionado de la herrería, pero Corominas (1980) observa la evolución paralela que experimentaron en español y en francés los significados de forger (forjar) y fraguar. En ese sentido, es preciso tener en cuenta la sinonimia de forjar y fraguar en el sentido de falsificar algo: Las pruebas de esa acusación son fraguadas/forjadas. Según el Trésor de la Langue Française Informatisé, el verbo forger se habría formado a partir del latín clásico fabricare.
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